No se fotografía porque sí
“- De un carrete de treinta y seis exposiciones en 35mm ¿Con cuántas fotos se queda?
-Depende del tema.” Henri Cartier-Bresson, entrevista con Richard L. Simon (1952)
Ahora pongo a discusión el papel de la cámara como objeto de medición. La cámara determina una conciencia de la técnica con la que se mira y se consume; entonces pensemos en todos los formatos, filtros, lentes, etc. Para terminar exhaustos, aunque la cámara nos limita en cierta manera. En un inicio nos obligaba a observar bajando la mirada a través de un visor, mientras se sostenía una caja, posteriormente el visor genera que el ojo se acerque al objeto; se veía ya en la cámara. A la relación fotógrafo-cámara, se añade las treinta y seis posibilidades de tener una fotografía. ¿Qué tan condicionado se encuentra el fotógrafo por la cámara?

Si la historia de la fotografía benefició – en parte – prácticas en torno al pictoralismo, entonces ¿qué sucede ahora que nada nos asombra? Las cosas han sido vistas ya más de mil veces, nada nos acciona a hacer fotografías. Si no se tiene una preconcepción de lo que será captado o se experimenta un estado poético, por la cámara, entonces esas treinta y seis posibilidades serán nada, ¿habría que vaciar la mirada?.
Primeras vacaciones pagadas, orillas del Sena, Francia, 1936. Es una de mis preferidas por Henri Cartier-Bresson. En la compilación de entrevistas en “Ver es un todo” existe una que leo una y otra vez, misma que ha originado estás palabras. En las respuestas, recuerdo la escena de La Tigre e la neve (2005) en la que Attilio (Roberto Benigni) describe cómo hay que vestir a la poesía, justo a la fotografía no hay que vestirla, pero sí hay que apreciarla detalladamente, darle su tiempo y su voz. Propiamente desconozco si el fotógrafo es o puede ser un poeta; a veces me contradigo con esto, no obstante, debe de entender que en cada imagen existe un control de identidad así como imágenes reprimidas y en ese mar de imágenes, cuestiono al fotógrafo actual, ¿Usted qué fotografía?.
A veces quiero creer que con sólo poseer una cámara me da justas treinta y seis posibilidades, a veces quiero creer que eso hace falta para fotografiar con la mirada.