Consejos para artistas de dos galeristas profesionales

Acabando de terminar la primera edición de mi Taller: El artista Profesional, consigo en mi time line de Facebook una declaración, casi desesperada, de la galerista venezolana Gabriela Benaim dando unos consejos para los artistas que quieren contactar a las galerías por medio de un email. Hago la mención que coincide con el taller, porque éste nace justamente de la precaria formación e información que tenemos los artistas sobre como desempañarnos en el circuito cultural en el que desarrollamos nuestra actividad y el papel de los agentes culturales que hacen vida en él.

Digamos que sigue muy presente esa visión romántica del artista que es descubierto, iluminando y protegido por un mecenas; llámese galerista, curador o gestor cultural, quien le guiará por el camino de la gloria, el reconocimiento y la trascendencia. Algo que en el siglo XXI no es más que un mal recuerdo de las prácticas renacentistas que se extendieron, quizás, hasta la mitad del siglo XX.

Al parecer, en un estado de obstinación, la fundadora de la Galería GBARTS con sede en Caracas, decidió desahogarse en su Facebook sobre la deficiente forma en que ciertos artistas la abordan y condescendientemente escribió 8 consejos para ellos:

CONSEJOS para artistas que quieren abordar vía mail a un galerista por primera vez:

  1. No envíe malas imágenes
  2. No envíe más de 10 imágenes
  3. Coloque siempre la ficha técnica que acompañe la imagen
  4. Envíe síntesis curricular no un CV de 4 páginas con foto de cara
  5. Envíe las imágenes adjuntas en baja, si necesitamos detalle lo solicitaremos
  6. No redacte el mail tipo yunque, contando la historia de su vida, sea concreto, sólo envié las imágenes, fichas y su información de contacto.
  7. Anexe las redes sociales al final de la información de contacto
    Pero sobre todo:
  8. NO ENVIÉ NUNCA MÁS NADA POR WETRANFER, No los van a abrir»

Más revelador y directo ha sido el comentario de Luis Romero, también galerista y quien añade en el post CONSEJOS para artistas de Gabriela Benaim una serie de comentarios con aportes valiosos, de los cuales rescato:

  1. No envíe imágenes, no envíe su síntesis curricular y tampoco pierda el tiempo redactando un email o contado la historia de su vida, si no se las han solicitado.
  2. Use las redes sociales con el fin de que su trabajo se pueda visualizar y quizás pueda conectar con algún galerista o cliente. Si hay interés de alguna galería, no dude que lo contactarán.
  3. No por el hecho de ser amigo de los artistas el galerista debe incluirlos en su lista.
  4. Sea transparente y consecuente una vez que esté trabajando con una galeria, no intente hacer el papel de galerista o dealer 
  5. No acepte de coleccionistas (inescrupulosos e inconscientes tratos fuera de la galeria) eso destruye el mercado para su obra.
  6. Confíe y sea respetuoso con el galerista, que no trabaja con usted sólo, si no con un grupo mayor de personas. Sea paciente, vender arte no es fácil y el mundo no gira en estos días en torno al arte.
  7. Respete los acuerdos de palabra o escrito a los que hayan podido llegar. La confianza y una buena relación puede devenir en una amistad que va más allá de las ventas y la exhibición. (quizás sea esa amistad lo que va a perdurar y la mejor ganancia).
  8. Genere complicidad y sea inteligente, proponga proyectos, ideas, será mucho mas productivo y divertido.

Vaya declaraciones ! Desde la perspectiva de los artistas tener acceso a un acto de sinceridad de esa naturaleza es casi un regalo. Pero inspeccionemos entre lineas que nos pueden aportar estos testimonios:

Primero No podemos abordar a un galerista si no  tenemos un trabajo sólido y organizada nuestra información.

Segundo Ser claros y directos en quiénes somos, qué hacemos y qué queremos.

Tercero Nuestro material debe ser editado y manejado con altos estándares de calidad.

Cuarto La importancia de nuestras redes sociales a la hora de establecer conexiones y difundir nuestro trabajo.

Quinto Establecer plataformas de comunicación de fácil acceso.

Sexto Participar de varias actividades dentro de nuestro circuito cultural. Hacernos presentes.

Séptimo Proponer acciones que enriquezcan la dinámica de nuestro circuito. Pertenencia.

Octava Para quienes ya tienen una relación con una galería: ser respetuosos de los acuerdos y de las relaciones que se establecen en la industria cultural.

Novena Estudiar las formas de comunicación con el galerista antes de establecer un contacto

El único punto en desacuerdo entre los galeristas está en la forma de comunicarse. En este sentido, me inclino por el criterio de Luis Romero sobre la inoperancia de enviar por email.

En el networking actual y el ataque constantes de spam, el trato por email es eficaz sólo si suceden tres cosas: Es solicitado por el galerista; luego de una conversación personal donde se ofrece enviar por email algún tipo de material; o el galerista se ha suscrito a tu newsletter. Del resto, es un acto de ingenuidad esperar respuesta o si quiera atención a un email enviado por un extraño

Pero lo más importante que leemos de estos consejos, es que no podemos pretender abordar a un galerista, curador o director cultural si no tenemos un trabajo sólido que ya haya transitado por varias capas del entramado cultural y especialmente si no hemos trabajado en nuestro Dossier.

¿Y qué es un Dossier? Es un dispositivo que nos ayuda a ordenar, presentar y comunicar nuestras ideas, obras e intenciones como artista. Es un instrumento de comunicación.

En un mundo saturado de archivos, de imágenes y de propuestas, debemos ser directos, claros y precisos con lo que mostramos y con lo que queremos hacer con ello (exposición, publicación, etc).

Para la elaboración del Dossier es importante establecer su estructura organizativa, recabar la información personal y de nuestros proyectos y utilizar nomenclaturas técnicas precisas cuando se requieran (Fichas técnicas) y una edición bien intencionada de nuestras obras.

En definitiva, un trabajo de comunicación profesional que va más allá de nuestros procesos creativos y de producción artística.

Fototeca de Monterrey, Marcel del Castillo, Fotografía Contemporánea
Exposición «Ciudad de las Montanas» Fototeca de Monterrey / Foto: Marcel del Castillo

Más adelante, en respuesta a un comentario, Gabriela hace otra declaración fundamental «busca una galería que se vaya con la línea de tu trabajo».  

Suena evidente, ¿cierto?, pero es algo que los artistas poco entendemos, o lo entendemos muy tarde. Los Museos, galerías y los espacios independientes tienen sus propias historias, dinámicas y lineas de investigación, por lo tanto los artistas que entran a determinados espacios forman parte de esas características especiales del lugar. Nuestro trabajo no es universal, no se ubica en todos los lugares, de ahí que, nuevamente, más allá de nuestros procesos artísticos, evaluar y estudiar los espacios de exhibición es fundamental para presentar propuestas.

Estudiar el tejido cultural en donde nos desenvolvemos; quiénes son los agentes culturales que lo conforman; quiénes son los directores y curadores; estudiar sus propuestas; qué han mostrado en sus espacios; qué publican en sus redes o de qué hablan en sus charlas. Una vez realizada la investigación tendremos alguna claridad sobre qué, a quién y cómo presentaremos nuestro Dossier para conseguir ser expuestos.

Las galerias comerciales cumplen un papel fundamental en el tejido cultural, construyen el mercado del arte y son conectores e intermediarios entre los artistas y sus obras con los coleccionistas públicos y privados, así como con curadores e investigadores. Pero su principal función es el negocio del arte. Quejarnos, como artistas, que las galerias sólo exponen artistas que venden, no solo revela un desconocimiento de la industria cultural sino una inequívoca falta de formación.

Ahora bien, que producto de sus dinámicas comerciales corporativizadas se distorsionen los trabajos de los artistas, se banalice el arte, se intente homogenizar la producción artística y se excluyan trabajos que proponen rupturas y reflexiones sobre los cuestionamientos contemporáneos, es otro tema, del que debemos estar atentos, pero del que hablaré en otro texto.

Es importante comprender que los galeristas son tan diversos como los artistas, no hay un camino seguro para llegar a ellos. Ellos están ubicados en otra área del tejido cultural desde donde deben emprender acciones para llegar a los coleccionistas y compradores de arte, tarea por lo demás difícil. Pero que revela un entramado profesional al que el artista, por más crazy, intenso y caótico que sea en su proceso creativo, tendrá que entrar por el camino de  la comunicación con bases profesionales para que pueda ser recibido y entendido, tanto en el caso de que un galerista se interese en su obra, como del propio artista interesado en exhibir en determinada galería.